Feb 1, 2018

Hoy cumpliría 90 años pero murió en Auschwitz

Tal día como hoy, hace 18 años,  el 1 de febrero de  2003, la nave espacial Columbia se desintegró sobre Texas y Luisiana 16 minutos antes de su aterrizaje. Un golpe contra el ala izquierda en el momento del despegue, no apreciado en ese momento, provocó que la nave se desintegrara al contactar de nuevo con la atmósfera terrestre. 
Murieron los 7 miembros de la tripulación. 
Entre ellos estaba Ilan Ramon (el primero desde la derecha).


En ese viaje, el astronauta israelí llevaba como recuerdo un dibujo, titulado "Paisaje lunar", obra de un niño judío llamado Petr Ginz.  La madre de Ilan había sido una de las víctimas que sufrió los horrores del genocidio que la Alemania nazi y sus colaboradores perpetraron en Europa y, tras ponerse en contacto con Yad Vashem, la Autoridad para el Recuerdo y Memoria de las Víctimas del Holocausto, en Jerusalén, Ilan  decidió llevar consigo este dibujo como homenaje a las víctimas de la Shoá.




(Placa conmemorativa en Yad Vashem, Jerusalén. Fuente: @ventura5b)



Tras el accidente de la nave espacial, la historia de Ilan Ramon y sus compañeros dio la vuelta al mundo.  Entonces, un vecino de Praga que había comprado un edificio unos años antes, en el barrio de Modrany, llamó a Yad Vashem para informarles de que tenía en su poder escritos y dibujos de un tal  Petr Ginz, encontrados en el sótano de la casa. Así, casualmente, vieron la luz los escritos del joven Petr. Podemos imaginar el sentimiento que inundaría a su hermana Eva cuando comprobó que las obras de su hermano se habían conservado. 

Petr Ginz había nacido en Praga, Checoslovaquia, el 1 de febrero de 1928. Hoy cumpliría 93 años.  Desde pequeño fue un niño con un talento excepcional:  inteligente y curioso, lector empedernido y buen dibujante.  



Cuando los nazis invaden Checoslovaquia, el 15 de marzo de 1939, Petr vive con angustia las leyes que rápidamente dictan contra los judíos.  En junio, se promulgó un decreto que prohibía a los judíos prácticamente toda actividad económica, fueron despedidos de sus trabajos y gran parte de sus bienes fueron incautados.

Entre  el 19 de septiembre de 1941 y el 9 de agosto de 1942, escribe sus reflexiones y vivencias en unas hojas, sin ninguna intención literaria,  que, posteriormente, fueron editadas en 2003,  con el título "Diario de Praga (1941-1942)",  a cargo de Chava Pressburger, hermana de Petr y superviviente del Holocausto, en la editorial Acantilado. 


(fuente: @ventura5b)

El viernes, 19 de septiembre de 1941, Petr escribe: 

"Hay niebla. Han sacado un distintivo para los judíos que es más o menos así:

(fuente: Daniel Ullrich, Threedots)

Camino del colegio conté 69 "Sherifs"; mamá, más tarde, contó más de cien.
A la avenida Dlouha la llaman la "Vía Láctea"
(página 35)

La obligación de llevar el distintivo amarillo, incomprensible para el joven Petr,  le lleva a escribir incluso con cierto tono de humor. No podía imaginar lo que estaba por llegar. 

Sus excelentes notas escolares o los regalos que recibe por su compleaños, la prohibición de transitar por unas calles o usar el transporte público o comprar en determinadas tiendas, el transporte y desaparición de vecinos, amigos y familiares, la expulsión de la escuela de los estudiantes judíos,... Petr recoge en el papel lo que sus ojos de niño observan y apenas comprenden y los sentimientos que le despierta lo que vive en su querida Praga. 

(fuente: El último vuelo de Petr Ginz guía docente UNESCO)
(Colección privada de Cheva Pressburger- Eva Ginz)


Petr es deportado al campo de Terezin, (esa ciudad supuestamente modelo con la que los nazis pretendieron engañar a la opinión pública y que fue incluso visitada por la Cruz Roja Internacional como objeto de propaganda nazi)  donde dirige una revista clandestina realizada por el grupo de jóvenes del edificio número 1 del sector L417 , de la que se conservan cientos de páginas (Vedem). En dicha revista se publicaron ensayos, poemas, relatos cortos y noticias sobre los acontecimientos que vivían en el campo. A Terezin llegaron unos 145.000 judíos. Unos 88.000 fueron enviados a Auschwitz. Del resto, casi 40.000 murieron de hambre, frío, golpes y epidemias. Al terminar la guerra, los sobrevivientes eran poco más de 17.000. 

(fuente: By Terezínská štafeta - Own work, CC BY-SA 3.0) https://commons.wikimedia.org/w/index.php?curid=26759909 



Petr pintó más de 120 obras y  escribió varias novelas, aunque solo se conserva una,  donde expone su admiración por Julio Verne:  "La vuelta al mundo en un segundo", " De Praga a China",  "El sabio de las montañas de Altay", "Viaje al centro de la Tierra" y "El visitante de la época de las cavernas" .


Nada mejor que las propias palabras de Petr para explicar cómo, incluso en esas condiciones extremas, chicos y chicas desafiaran a la barbarie con una fortaleza y valentía admirables. Impresiona que, en medio del horror, sobrevivieran  la curiosidad, la creatividad y el afán de saber. 


“La simiente de una idea creativa 
no perece entre el barro y la mugre. 

Brota incluso allí y florece 

como una estrella refulgente 

en medio de la oscuridad.” 

 (página 151)



Dos años estuvo Petr en Terezin. En septiembre de 1944, es deportado al campo de exterminio de Auschwitz, donde murió asesinado en las cámaras de gas. Tenía 16 años. 





(fuente vídeo: material educativo Yad Vashem)


Un asteroide de unos  4 km de diámetro, el número 50413, descubierto en el año 2000 entre Marte y Júpiter, lleva el nombre de Petr Ginz.

El Diario de Petr Ginz es un lectura obligada para aquellos que quieran profundizar en el Holocausto y constituye un material con un alto potencial educativo en el aula para acercar a los jóvenes a este terrible hecho histórico. 

No sabemos lo que Petr Ginz, y el millón y medio de niños/as asesinados durante el Holocausto, podrían haber aportado a la Humanidad. pero, en palabras del Secretario General de la ONU, "estamos convencidos de nuestra obligación de recordar y honrar a todas las víctimas de esa tragedia, de ese genocidio". "El mejor homenaje a su memoria es un esfuerzo constante por recordar las enseñanzas universales del Holocausto para que nuestras generaciones futuras no sufran nunca ese horror”.